A las afueras del penal concesionado de Alto Bonito en Puerto Montt se respira desde temprano una tensa calma. Una fogata a las afueras de la cárcel es la viva presencia de la movilización que a sumado a funcionarios civiles y uniformados de gendarmería al paro nacional de esta institución que agrupado a las distintas asociaciones de funcionarios, teniendo cerca de 500 trabajadores movilizados en esta protesta.
Este paro indefinido que se realiza en todas las unidades penales del país, es en el fondo un rechazo a la privatización de las funciones de gendarmería, la nula política de rehabilitación del gobierno de turno para los reclusos, la falta de infraestructura adecuada de los penales, falta de personal y equipamiento adecuado para los funcionarios.
En el exterior del penal de Alto Bonito a esta hora existe un resguardo continuo de carabineros que están en la ruta monitoreando el desarrollo de estos acontecimientos.
Nota: Wladimir Soto Cárcamo, antropólogo.