miércoles, 3 de septiembre de 2008

Narradores de Puerto Montt


Lejos, tan lejos de Puerto Montt, Rene Arcos Levi logro trasformarse en un exitoso profesional de las letras. Nacido en nuestra ciudad en 1964, estudió letras en la Universidad Austral de Chile en Valdivia, para después viajar a Santiago y ser alumno de Antonio Skármeta en su taller de guiones del “ Goethe Institut ”. Ha sido profesor en las Universidades Arcis y de la Republica, como también, columnista del desaparecido diario “ La Epoca ” , pero donde alcanzo mayor notoriedad nacional, es su trabajo como guionista del cineasta Andrés Wood en “ Historias de Futbol ” ( 1997) y la “ Fiebre del loco” ( 2001). En 1994 publicó en editorial Planeta su primer libro de cuentos titulado “ Cuentos apartes ” tras haber triunfado en el concurso de cuentos del diario “ El mercurio ”, el 2001 incursiono en el mundo de la novela con “ Después de todo ”. Se puede decir que este autor maneja con cautela al lector, para llevarlo al asombro y al descubrimiento de la narración que va más allá de cualquier limite moral.

Por ultimo tenemos a Ernesto Massiglio Soto, un actor relevante de nuestro ambiente artístico en los últimos años. Nació en Puerto Montt en 1955. Es paradocente, a dirigido talleres literarios en el Liceo Andrés Bello, fue parte de la extinta Sociedad de escritores de nuestra ciudad y fue integrante del grupo literario “ espantapájaros ”. Ha publicado sus trabajos en el diario “ La Nación ”, “ El alerce ” y revista “ Visur ”. Sus obras se publicaron en las antologías “ Pasión por la música ” ( 1996 ), de Lom ediciones que registra los ganadores del concurso nacional de cuentos organizado por la Feria del disco, “ Voces de la lluvia ” ( 1999 ) y “ Fragmentos de una historia” ( 2002 ) y “ Otros cuentos y Michelle Pfeiffer no es una asesina” ( 2008). Analizando su cuentos, siendo uno de los más logrados el titulado “ Y volverán las sinfonías...”, podemos apreciar una lucha incesante por experimentar en las formas del relato. La voz que narra, se alimenta de los elementos que proporciona las canciones de moda, los videoclips, la televisión, las historias en locales nocturnos y por cierto una secreta autobigrafia que no se atreve a cuestionar nada, por el temor a una fiesta que puede terminar, donde esos delirios surrealistas que brota en sus obras más débiles, son oscurecidos por una alma resentida por la sociedad y que huye de los espejos que ocultan las insistentes arrugas del tiempo.

Estos son algunos de nuestros narradores, que crean con su palabras nuevas posibilidad del lenguaje. El reto que viene para los futuros escritores, es saber penetrar en los cambios culturales de nuestra ciudad y entender a los seres que se desplazan por sus calles, lanzando al viento sus historias.